Luego de una gran polémica por la tecnología de escáneres ubicados en aeropuertos que "desnudaban" a la persona para saber si portaban algún material ilícito, estos fueron retirados.
Fue la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA por sus siglas en inglés) la que ordenó retirar estos equipos luego de proceder a su instalación en el 2008.
Estos equipos contaban con una tecnología basada en rayos X que mostraban una imagen monocroma del pasajero sin vestimentas.
A pesar de que el individuo escaneado no era reconocible, la imagen fue muy criticada, tanto que en algunos aeropuertos se permitiría la revisión tradicional si es que el pasajero lo solicitaba.
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